¿ Todo pasa y nada queda...?

SIEMPRE AL SECARSE LA ROSA.

j. m. moreno

Nunca pienses que el dolor

se acaba en la despedida,

porque es cosa bien sabida

que al agotarse un amor,

sea por falta de calor,

o que la ilusión declina,

lo que al parecer termina

será ausencia dolorosa,

porque al secarse la rosa

es más punzante la espina.

-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

( De “Desde el fondo del tiempo” ).

Comments

  • Hola J.M. Ya lo cantaba el Nano Serrat, "Todo pasa y nada queda, pero lo nuestro es pasar", y al paso del tiempo sobre un amor verdadero, queda el corazon grabado a fuego , nada lo puede borrar, solo el tiempo en algo amortiguar, marca solemne fija y fiel, hasta el mas alla nos ha de acompañar, no siempre es un castigo mas de una vez algun recuerdo furtivo , una sonrisa nos ha de sacar, recordando bellos momentos vividos, entre besos abrazos y entre muslos adormecido.- Me gustan tus letras

  • P O E S I A

    Algo siempre te queda mientras vivas.

    Ese tu estilo romantico que atrae.

    Saludos poeta.

  • Agradable décima.

    Pensé en ese declinar del amor hasta la ausencia dolorosa.

    Saludo cordial.

  • Distinguido caballero, aún quedan las punzantes espinas y el dolor al abrazarlas. Saludos cordiales. Adiós.

    RECUERDOS DE MI INFANCIA

    Mirando por el ojo del tiempo he observado

    en lejano pretérito la imagen de mi infancia

    entre frescos verdores bebiendo la fragancia

    que flota en el espacio de florido sembrado.

    Mucho antes que despierte el sol en el oriente,

    una voz infantil anuncia la presencia

    de asiduo vigilante que asiste con vehemencia

    la salud de los frutos que adornan el ambiente.

    La tarde se escabulle entre la mancha oscura

    de la manta nocturna que tiñe el occidente,

    una silueta mínima se aleja lentamente

    de la ciega parcela que veda la negrura.

    Terminó la faena de una nueva jornada

    entre efluvios y trinos que le dan alegría,

    el viento le susurra preciosa melodía

    y la brisa le brinda su canción perfumada.

    Si Tunalmal no viste su traje de costumbre

    ni sus perlas adquieren su atrayente blancura,

    siempre se escucharán las notas de dulzura

    desde los bajos llanos hasta la altiva cumbre.

    Ocúltase una noche, despierta un nuevo día,

    en la senda del tiempo que muere en la distancia,

    pero el júbilo sigue abrazado a la estancia

    cantando dulcemente su grata melodía.

    Dentro de sus alforjas el tiempo deposita

    la beldad colorida que presenta natura.

    Y las montañas usan su vestimenta oscura,

    la alegrísima flora se dobla y se marchita.

    Adolfo González Hernández

    El Salvador, Centroamérica.

  • K hermoso xD

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