¿Estos 5 renglones te perturbarán hasta no poder dormir, te animas a leerlos?

Cuando regresé a mi casa después del trabajo, dejé mi maletín sobre el escritorio y me di vuelta para tomar la laptop. Cuando volví la mirada, el maletín ya no estaba, sino que en su lugar había una hoja de papel sobre la cual reposaba la siguiente frase: “Hola, papi… ¿jugamos?”.

La peculiaridad es que ese evento ocurrió un mes después de la muerte de mi pequeña hija. Por supuesto que un intruso estaba molestándome, pero la policía no encontró ni la más mínima evidencia de ello.

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