ola! me encanta escribir y leer poesia y la verdad es que es un poema precioso te agradezco que lo hayas puesto aqui para que los demas lo disfrutemos..... muchas gracias un beso
Tengo ganas de gritar, de decirle al mundo que ya todo acabó.
Creo que en realidad nunca empezó, nunca existió.
Me queda mi sentir como recuerdo, recuerdos inútiles de un sueño.
Sí, siento que todo fue un sueño. No concibo la idea que realmente haya ocurrido.
Amaneció y desperté por fin después aquella larga noche. Fue la noche más larga del mundo, porque te soñé varias veces y ahora no es más que un conjunto de fantasías.
Te soñé.
Soñé que nos conocíamos y me hablabas. Soñé que tenías la voz más juguetona y cálida. Soñé también tus ojos, los ojos más bonitos. Soñé que tenías una sonrisa cautivante, qué bonita sonrisa. Te soñé unas manos fuertes y unos brazos perfectos para tenderse en el suelo y quedarse dormida entre tu calor, porque soñé que contigo nunca habría frío ni malestar. Y alto, te soñé alto, para cubrirme de todos mis miedos cuando los tuviera. Y yo era pequeñita, pero contigo me sentía grande y perfecta. Soñé que comenzaba a quererte. Soñé que te amaba.
Recuerdo todos los detalles de ese sueño. Soñé que un día me quisiste, que me adoraste. ¡Que me abrazaste! ¿Fue posible? ¿Me besaste también, sentí tus labios? Soñé que me encontraba tan bien…
Y soñé que después me rechazabas, y te burlabas de mis ideas. Soñé con los mil y un celos que me hiciste sentir muchas veces, y las centenas de lágrimas que derramé.
Pero te soñé, por sobre todas las cosas, a ti. Eras casi perfecto. Y digo casi, porque a pesar de todo, seguías siendo un ser humano. Pero en mi inquieta mente te imaginé muchas veces junto a mí, incluso aunque hubiera sucedido, imaginaba que nunca te irías de mí. Soñaba que, pasara lo que pasara, nunca te alejarías de mí. Que siempre acabarías conmigo, y yo contigo. Tú y yo, juntos. Así lo soñaba.
Soñé que te escribía cartas, pero que nunca te las daba. Algunas sí, pero no parecían sorprenderte. Me limité a guardarme a mí misma las demás. Soñé que te amaba también por eso, porque nadie me había hecho escribir así. Y si eran cien las cartas que te escribiría, pues que así fuera. Y si era un libro, también.
Pero soñé que la historia iba y venía. Un hola y un adiós, un eterno vaivén. Algo entre los dos que aparentaba nunca acabar.
¿Qué fue entonces lo que me despertó?
Creo que fuiste tú. Y me dijiste “Hola, aquí estoy, y sí existo pero no correspondo a tu amor.”
Y lloré y sigo llorando, porque me queda la luna de aquella noche, la más larga en la historia, donde te soñé a ti, mi primer gran amor.
Comments
1)
Mientras me hablabas y yo te miraba,
se detuvo el tiempo en medio instante:
el amor me llamaba y yo le obedecía.
Mientras me susurrabas y yo te amaba,
se alzaron los sentimientos,
mandó tu voz,
el cielo se hizo visible en tus ojos,
y yo pronuncié el querer en tus labios.
Fue una mirada,
un frenesí de besos,
una lujuria de sentimientos.
Fue un instante sin fin,
sin tiempo para soñar.
Y entonces despertamos,
... y seguimos amándonos.
2)
Mi objetivo son tus sentimientos,
uno a uno, de mi a ti,
riendo tristezas,
llorando sonrisas,
mi objetivo eres tú,
y sólo tú, para amarte.
Ahora puedo oírte,
puedo sentir tu silencio,
puedo recorrer tus besos
y soñar tus labios,
puedo hasta escuchar tu melodía,
aún cuando estés lejos
y seas todo nostalgia.
autores, los desconozco.
ola! me encanta escribir y leer poesia y la verdad es que es un poema precioso te agradezco que lo hayas puesto aqui para que los demas lo disfrutemos..... muchas gracias un beso
yo te amo tu no me amas!!!!
DAME 10 ESTRELLAS!!!!!! JAJAJAJA
DE OTRO MODO
Si en vez de ser así,
si las cosas de espaldas-fijas desde siglos-
se volviesen de frente
y las cosas de frente -inmutables-
volviesen las espaldas,
y lo diestro viniera a ser siniestro
y lo izquierdo derecho...
¡No sé como decirlo!
Suéñalo
con un sueño que está detrás del sueño,
un sueño no soñado todavía,
al que habrá que ir,
al que hay que ir,
como arrancando mil velos de niebla
y al fin el mismo sueño fuese niebla.
De todos modos, sueñalo
en ese mundo, o en este
que nos acerca y nos apaga
donde las cosas son como son,
o como dicen que son,
o como dices que deberían ser...
Vendríamos cantando por una misma senda
y yo abriría los brazos
y tu abrirías los brazos
y nos alcanzaríamos.
Nuestras voces unidas rodarían
hechas un mismo eco.
Para vernos felices
se asomarían todas las estrellas.
¡Si pudiera ser como es,
o como no es... En absoluto diferente!
Pero.... JAMÁS.
¿Sabes el tamaño de esta palabra:
JAMÁS?
¿conoces el sordo gris de esta piedra:
JAMÁS?
¿Y el ruido que hace
al caer para siempre en el vacío:
JAMÁS?
No la pronuncies, dejámela.
Cuando esté solo yo la díré en voz baja
suavizada de llanto así:
jamás.......
Nocturno a Rosario. Es un poema hermoso sobre el amor no correspondido.
"Cuando el tiempo pase y tú me olvides,
silencioso vivirás en mí;
porque en la penumbra de mis pensamientos,
todos los recuerdos me hablarán de ti."
De Bécquer. Bonito y muy cortito, por si lo preferías así ^^
Mientras me hablabas y yo te miraba,
se detuvo el tiempo en medio instante:
el amor me llamaba y yo le obedecía.
Mientras me susurrabas y yo te amaba,
se alzaron los sentimientos,
mandó tu voz,
el cielo se hizo visible en tus ojos,
y yo pronuncié el querer en tus labios.
Fue una mirada,
un frenesí de besos,
una lujuria de sentimientos.
Fue un instante sin fin,
sin tiempo para soñar.
Y entonces despertamos,
... y seguimos amándonos
eso sobre beso
tu piel encarna la belleza
tu piel pide mil caricias
suave sobre suave
tu cuerpo para amar
tu alma para sentir
tierna sobre bella
¿cómo no desearte?.
Te quiero con flores
te quiero con palabras
te quiero sin sentido
te quiero sin promesas
te quiero al despertar
te quiero al despedirte
te quiero para quererte
te quiero para darte
te quiero y te quiero
no me preguntes por qué.
Porque tú eres tú
y yo vivo soñándote
porque mi mundo son tus sueños
y tus sueños son deseos.
porque te quiero
y quererte es mi camino
El camino que amo: tú.
Para ti que te siento,
que anhelo tus suspiros
que recorro tus ausencias
que añoro aunque te acompañe
para ti que eres mi ser
y siendo mi ser, te pertenezco.
Imagino tu mano sobre mi mano,
paseando miradas y caminando amores,
imagino mis sueños, siempre en tus sueños
rindiéndome ante tus pasiones,
sucumbiendo ante sin resistirme,
imagino tus besos, su sabor a placeres
e imaginando, muero por amarte, porque ya te amo.
Quiero una de tus miradas,
para enmarcarla con mis recuerdos,
para enterrarla en mis tesoros,
quiero todas tus miradas,
para saber que me amas,
para vibrar al son de tus ojos,
y no dejar de amarte
espero te sirvan saludos
uh ... hay tantos, y de los más bellos de Benedetti, te comparto estos:
Hagamos un trato
Compañera
usted sabe
que puede contar
conmigo
no hasta dos
o hasta diez
sino contar
conmigo
si alguna vez
advierte
que la miro a los ojos
y una veta de amor
reconoce en los míos
no alerte sus fusiles
ni piense qué delirio
a pesar de la veta
o tal vez porque existe
usted puede contar
conmigo
si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo
no piense qué flojera
igual puede contar
conmigo
pero hagamos un trato
yo quisiera contar
con usted
es tan lindo
saber que usted existe
uno se siente vivo
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos
aunque sea hasta cinco
no ya para que acuda
presurosa en mi auxilio
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo
************
Táctica y estrategia
Mi táctica es
mirarte
aprender como sos
quererte como sos
mi táctica es
hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible
mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme en vos
mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos
mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple
mi estrategia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites
La noche más larga del mundp
Tengo ganas de gritar, de decirle al mundo que ya todo acabó.
Creo que en realidad nunca empezó, nunca existió.
Me queda mi sentir como recuerdo, recuerdos inútiles de un sueño.
Sí, siento que todo fue un sueño. No concibo la idea que realmente haya ocurrido.
Amaneció y desperté por fin después aquella larga noche. Fue la noche más larga del mundo, porque te soñé varias veces y ahora no es más que un conjunto de fantasías.
Te soñé.
Soñé que nos conocíamos y me hablabas. Soñé que tenías la voz más juguetona y cálida. Soñé también tus ojos, los ojos más bonitos. Soñé que tenías una sonrisa cautivante, qué bonita sonrisa. Te soñé unas manos fuertes y unos brazos perfectos para tenderse en el suelo y quedarse dormida entre tu calor, porque soñé que contigo nunca habría frío ni malestar. Y alto, te soñé alto, para cubrirme de todos mis miedos cuando los tuviera. Y yo era pequeñita, pero contigo me sentía grande y perfecta. Soñé que comenzaba a quererte. Soñé que te amaba.
Recuerdo todos los detalles de ese sueño. Soñé que un día me quisiste, que me adoraste. ¡Que me abrazaste! ¿Fue posible? ¿Me besaste también, sentí tus labios? Soñé que me encontraba tan bien…
Y soñé que después me rechazabas, y te burlabas de mis ideas. Soñé con los mil y un celos que me hiciste sentir muchas veces, y las centenas de lágrimas que derramé.
Pero te soñé, por sobre todas las cosas, a ti. Eras casi perfecto. Y digo casi, porque a pesar de todo, seguías siendo un ser humano. Pero en mi inquieta mente te imaginé muchas veces junto a mí, incluso aunque hubiera sucedido, imaginaba que nunca te irías de mí. Soñaba que, pasara lo que pasara, nunca te alejarías de mí. Que siempre acabarías conmigo, y yo contigo. Tú y yo, juntos. Así lo soñaba.
Soñé que te escribía cartas, pero que nunca te las daba. Algunas sí, pero no parecían sorprenderte. Me limité a guardarme a mí misma las demás. Soñé que te amaba también por eso, porque nadie me había hecho escribir así. Y si eran cien las cartas que te escribiría, pues que así fuera. Y si era un libro, también.
Pero soñé que la historia iba y venía. Un hola y un adiós, un eterno vaivén. Algo entre los dos que aparentaba nunca acabar.
¿Qué fue entonces lo que me despertó?
Creo que fuiste tú. Y me dijiste “Hola, aquí estoy, y sí existo pero no correspondo a tu amor.”
Y lloré y sigo llorando, porque me queda la luna de aquella noche, la más larga en la historia, donde te soñé a ti, mi primer gran amor.